Análisis de los nuevos Breogán y Bilbao Basket: dos plantillas muy cambiadas y el difícil reto de repetir lo del año pasado

El Breogán vivió la pasada temporada un año casi perfecto. Recién ascendido a la ACB acertó con los fichajes y en vez de luchar por la permanencia, como ellos mismos pensaban, estuvieron en la zona alta dos tercios de la temporada, disputaron la Copa del Rey y pelearon casi hasta la última jornada por meterse en los playoff. El Bilbao Basket empezó con muchas derrotas pero desde diciembre mejoró muchísimo, acertó con un par de fichajes y fue hacia arriba hasta terminar noveno en la clasificación final, empatado con el propio Breogán y con apenas un triunfo menos que el octavo clasificado.

Ahora ambos conjuntos afrontan el casi imposible reto de mejorar ese pasado curso. Estuvieron por delante de equipos de más presupuesto en muchos momentos como el Gran Canaria, el Unicaja o el Zaragoza. Pero ése es el reto que afrontan, no sufrir por la permanencia y hacerlo bien para aspirar a la zona media de la tabla.

Lo han hecho por caminos diferentes. El Bilbao Basket inicia una nueva era al dejar Mumbrú el banquillo después de tres temporadas. El elegido para sustituirlo fue Jaume Ponsarnau. Plantearon una renovación de la plantilla importante porque retener a jugadores como Inglis era imposible a nivel económico. Pero lograron retener a Goudelock, Withey, Hakanson y se movieron rápido en algún fichaje como el del pívot Michale Kyser o el alero Xavi Rabaseda.

Luego llegó el del escolta Francis Alonso, ex del Unicaja, y recuperaron a un ‘cuatro y medio’ como Sulejmanovic dos años después de su marcha al Tenerife. También trajeron de vuelta a la ACB al base Nikola Radicevic. Finalmente, en la búsqueda de un cuatro tirador la apuesta fue el sueco Denzel Andersson.

Habían configurado una plantilla con una mezcla de bastante conocedores de la ACB, con espacio para el crecimiento de Alonso, con referencias claras en ataque como Goudelock o Withey cuando todo se torció. Primeros minutos del primer amistoso de la pretemporada y se rompió la rodilla Goudelock, el veterano escolta. No fue fácil encontrar un sustituto pero finalmente incorporaron al base-escolta Adam Smith, que jugó bien el Hapoel Holon la pasada campaña. Tras esa lesión, otra por una temporada igualmente, la de Tomeu Rigo, así que buscaron y obtuvieron la cesión desde el Barcelona del joven Agustin Ubal.

En el Breogán sí que continúa en el banquillo Mrsic, fichado en febrero cuando Paco Olmos se fue al Burgos en un extraño movimiento nada habitual. A partir de ahí una amplia renovación de la plantilla pues apenas continúan Lukovic y los hermanos Quintela.

Es decir, que han realizado diez incorporaciones nada menos. Muchas de jugadores no muy conocidos, caso de los serbios Momirov y Nenadic. Mrsic trajo a un jugador que tuvo en la Cibona como Toni Nakic. En la pintura, el pívot austriaco Luka Brajkovic llega directamente desde la etapa universitaria en EEUU. El ala-pívot congoleño Jonathan Kasibabu llega desde el Nantes francés. El base alemán Hollatz es un jugador muy prometedor pero de 21 años y poca experiencia al alto nivel.

Sí han tenido más recorrido el pívot Ethan Happ y especialmente un escolta anotador que ha jugado en diferentes equipos ACB y ahora está de vuelta, Scott Bamforth. Víctor Arteaga y Sergi García buscan relanzar sus carreras tras una temporada difícil, con descenso en Andorra el pívot y escasos minutos en el Gran Canaria el base. Muchos debutantes en este plantel y falta de tres referentes claros como fueron Musa, Mahalbasic y Bell-Haynes, lo que puede llevarles a bajar varias posiciones.