La reunión que mantuvieron ayer Mumbrú y Raúl López, en nombre de la plantilla del Bilbao Basket, con el grupo de inversores y empresarios que están dispuestos a coger las riendas del club no significó ningún avance esencial. Hay un prudente optimismo en el plantel, pero se mantiene la huelga indefinida a la espera de propuestas concretas. Los jugadores no quieren más promesas sino realidades tras haber cobrado sólo una nómina y tener 5 meses de retrasos en sus salarios.
El grupo que componen Enrique Guzmán, Iñaki Calvo, Carlos del Campo, Javier Montoya y Juan Elejalde llevan meses queriendo dirigir el club vizcaíno, pero no quieren a Gorka Arrinda dentro. El máximo accionista y actual consejero delegado para irse quiere sacar rendimiento a sus acciones y quería permanecer en el Bilbao al frente del área deportiva. Esto ya no parece posible.
Así que el otro punto es la clave, que deje de ser el máximo accionista. Iñaki Calvo hizo ayer unas declaraciones claras: «La llave la tiene Gorka Arrinda. Como grupo ahora mismo no tenemos ninguna posibilidad de gestión. Todo pasa por una Junta General de Accionistas que democráticamente habilite a otra gente para llevar las riendas de este club, para gestionarlo. Y en estos momentos, como ese paso todavía no se puede dar, tendríamos que ver si pudiéramos estar habilitados, evidentemente con la buena voluntad del actual máximo accionista de este club, para llevar esas riendas».
En el otro lado, Mumbrú dio otra clave del asunto. Según explican los jugadores, la desconvocatoria de la huelga pasa por cobrar parte de sus atraso. El alero señaló que que «la huelga está oficialmente convocada y seguimos adelante de momento», pero reconoció que «ellos están intentando conseguir liquidez inmediata, intentando solucionarlo todo. Nos han expresado su total disposición a intentar conseguir algo en esta semana límite que tenemos y vamos a seguir hablando. La disposición por su parte es máxima y nosotros también estamos intentando poder ayudar».
Si todas las conversaciones y acuerdos avanzan, el jueves puede haber un principio de solución.
Lo que no se entiende a estas alturas es que el Sr. Arrinda siga en sus trece con el tema de las acciones. Aunque no se haya hecho pública la deuda que mantiene el Bilbao Basket (como es habitual), tiene que ser significativa, lo suficiente para que el IMQ se haya echado atrás como sponsor. Esto confirma que en estos momentos, Club Basket Bilbao Berri, S.A.D. está en quiebra, y por ello, tanto las acciones del Sr. Arrinda, como las del resto de socios minoritarios, no valen nada.
Se dice que gracias a este Sr. hay baloncesto en Bilbao, y es posible, aunque tampoco lo ha hecho desinteresadamente, y sería interesante saber la rentabilidad que ha sacado a su inversión.
Pero de lo que se trata ahora es que no nos deje sin baloncesto de nuevo, y es el futuro inmediato si no se larga de una vez. Ya tuvimos una larga travesía del desierto a partir de 1991 (si no me falla la memoria), en la que estuvo implicado su padre, y esta ciudad y esta afición no se lo merece.
[…] por la que está atravesando el club. Una vez conocido, a través de los medios de comunicación, las declaraciones del vicepresidente del club, Iñaki Calvo, miembro del autodenominado “grupo alternativo de gestión”, respecto a la “nula capacidad de […]
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