El consejero delegado de Netflix, Reed Hastings, ha destacado que el éxito de Netflix radica en «escuchar y adaptarse» a lo que quieren los usuarios y las nuevas tendencias, más que tratar de lanzar algo totalmente nuevo «que nunca sabes cómo va a salir». De hecho, es lo que hicieron desde la creación de la empresa, explicó Hastings en una conferencia durante el Mobile Congress en Barcelona, desde los inicios de Netflix. Su objetivo era ofrecer vídeo en streaming, pero hace unos años la capacidad de la red lo hacía imposible.
Desde hace tres años la tecnología del cable permite llegar a los hogares de la gente en muchos países. Su crecimiento fue enorme en EEUU, donde aseguró que ya tienen 50 millones de suscriptores.
Luego empezaron a expandirse por todo el mundo, desde Canadá a Australia hasta llegar a Europa. Esto ha hecho que hayan llegado a 100 millones de hogares, informó Hastings. Asimismo, completó el dato indicando que la mitad de sus abonados están fuera de EEUU.
Además, a su llegada a Europa han buscado crearse mercado produciendo series en cada país, no siempre afortunadas. Por ejemplo, Marsella, rodada en Francia, fue un fiasco.
Poder crear producciones en muchos países y estrenarlas en todo el mundo es, de hecho, su sueño cumplido. «¿A quién no le puede gustar eso?», se preguntó Hastings. Y definió Netflix como algo similar a la «libertad»: poder elegir cuándo, cómo y dónde ver contenidos.
A la compañía no le preocupa la competencia. De hecho, la alaba: «Youtube, Amazon, BBC… no quieren acabar con nosotros, sino agregar contenido de calidad al mercado. Eso es bueno para todos».
Por último, aseguró que van a seguir produciendo series de calidad como la más famosa que han hecho, Narcos, y otras de buen sello como Marco Polo o The Crown.