El draft de la NBA de esta madrugada tuvo pocas sorpresas en las primeras elecciones y sí dejó algunos intercambios de ‘picks’ más retrasados. Tras cambiarse los Celtics y los Sixers su elección hace pocos días, Marquelle Fultz acaba en la franquicia de Filadelfia tras ser elegido como número uno. Es un base con gran potencial anotador pero los de Boston necesitan otro tipo de jugador para seguir aspirando a la final y se fueron a por el alero Jayson Tatum.
El número dos fue así para una estrella universitaria que va a tener impacto publicitario desde ya y queda ver si luego responde en la cancha: Lonzo Ball, que aterriza en los Lakers más desastrosos en décadas. Con él seguirán la reconstrucción a la espera de poder coger alguna estrella consolidada en el mercado libre o vía intercambio, con Paul George (Pacers) en el punto de mira.
El número cuatro fue para los Suns, que apostaron por Josh Jackson. El cinco, De’Aaron Fox, a los Kings, el seis, Jonathan Isaac, a Orlando Magic, y el siete, el finlandés Lauri Markannen, formado en la universidad de Arizona. Es un 2,13 que juega lejos del aro y lanza muy bien de tres. Fue elegido por los Wolves pero acaba en los Bulls tras un intercambio.
El resto de posiciones quedaron así.
El escolta francés Frank Ntilikina, del Estrasburgo, dio la sorpresa pues se le calculaba el puesto 15 y acabó octavo y en los Knicks. Por su parte el letón Anzejs Pasecniks salió en el puesto 25 y elegido por Orlando Magic, que lo envió a los Sixers. Ahora el pívot del Gran Canaria es probable que deje el equipo pagando su cláusula de 400.000 euros y dé el salto a la NBA. Vezenkov, del Barcelona, salió en segunda ronda en el puesto 57.