La audiencia en TVE 1 de la final olímpica de este domingo fue de 5,4 millones de personas de media, con picos de más de 6,5 millones en el tramo final del España-Estados Unidos. Esto supuso una cuota de pantalla durante este partido de un 44,9 por ciento. Es la mejor cifra para un partido de España en número de espectadores desde la final del Mundial de Saitama’2006.
La entrega de la medalla un cuarto de hora después de acabar el choque fue seguida por 3.560. 000 personas, con un 32% de share.
Es una cifra récord que supera con mucho los 2.930.000 de la semifinal del viernes contra Rusia, que supuso un share del 30 por ciento.
Evidetemente se trata de una cita histórica y no se puede comparar con un partido ACB, pero que ésta tenga unos datos de audiencia tan desastrosos invita a la reflexión.
Este dato demuestra que el baloncesto (el bueno) gusta e interesa, así que las cabezas pensante de la ACB, que piensen a ver como reflotan su producto.
Comments are closed.