Dos modificaciones conocidas este lunes a partir de la proliferación de brotes de coronavirus en equipos de toda Europa. En la Eurocup, se retrasa dos semanas, al 13 de enero, el inicio de la segunda fase. Ahora hay tres disponibles para poder encajar la multitud de encuentros aplazados que se conocen ya y los que puedan llegar. Entre ellos, los del Andorra, que tiene tres pendientes con el de esta semana y dos el Joventut.
En la ACB, un cambio en el protocolo bastante lógico después de lo vivido hace dos semanas en Burgos, cuando el San Pablo tuvo que jugar con sólo seis fichas del primer equipo disponibles. Ahora cuando un equipo no cuente al menos con ocho jugadores por dar positivo el resto sus partidos se aplazarán de forma automática. El conjunto burgalés salía de un brote y disputó aquella cita con seis y con apenas dos entrenamientos con ellos, lo que originó una cascada de críticas y comentarios.
Eso supone reconocer que el partido Burgos-Fuenlabrada nunca debió disputarse en esas condiciones. Veremos cómo afecta a la larga a la clasificación de ambos equipos ese resultado totalmente adulterado.
No solo a la clasificación de Burgos y Fuenla, sino a todos los que compiten con ellos, ya sea por arriba o por no descender.
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