El Unicaja sumó la tercera victoria en ocho días, dos en la Liga a domicilio y en canchas difíciles como Valencia y Las Palmas, y otra en la Eurocup frente al Buducnost. La crisis parece olvidada con esta buena racha.
El 80-84 frente al Gran Canaria llegó tras un buen partido en ataque, con mucho acierto en el triple, 12 de 25, distancia en la que estaban fallando, y con Brizuela como líder, 23 puntos del escolta. Además, los tres cincos que más jugaron, Thompson, Guerrero y Nzosa, ayudaron bastante.
Por contra, el ‘Granca’ se hunde y sigue encajando muchos puntos. Apenas han sumado una victoria en cinco jornadas. Tras el 21-16 en el primer cuarto frente al Unicaja, el segundo cuarto visitante fue muy bueno y no así del cuadro amarillo, que se hundió hasta alcanzarse el descanso con un 32-41.
Los de Casimiro llegaron a tener 15 puntos de ventaja, pero se fueron reduciendo y el ‘Granca’ buscó en la segunda mitad meterse en el encuentro. No lo lograron del todo y en la recta final el Unicaja supo manejar la ventaja de 8-10 puntos que tenían (72-82, min. 38).
80. Herbalife Gran Canaria (21+11+28+20): Albicy (18), Dimsa (8), Shurna (2), Wiley (8) y Costello (18) -quinteto inicial-, Ferrari (8), Santana (3), Burjanadze (5) y Okoye (10).
84. Unicaja Málaga (16+25+23+20): Boutelle (13), Díaz (7), Thompson (9), Alonso (8), y Guerrero (8), -quinteto inicial-, Waczynski (4), Suárez (3), Brizuela (23), Abromaitis (5), Gerun (-) y Nzosa (4).
Sencillamente el Granca nunca dió sensación de poderse llevar el partido. El ataque es desorganizado, las pérdidas de balón infantiles y las ayudas en defensa como pollo sin cabeza. Desde el banquillo otro día de susurros.
Correcto.
El equipo necesita ser intenso todo el partido. La pájara desde el 21-14 fue épica. Después siempre a remolque y sin sensación de poder ganar.
Hay jugadores que los pone juntos teniendo el mismo rol, Albicy-Ferrari, Willey-Costello.
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