Ante una herida que sangra lo suyo es dar un tajo que corte de raíz el problema. Debió hacerlo hace semanas el Asefa Estudiantes y lo ha pagado. Pero ayer por la tarde finalmente la sangría que suponía Antoine Wright dejó de debilitar al equipo colegial. El alero fue despedido en pleno entrenamiento y ya es historia. La entidad entiende que su irresponsable comportamiento la exime de pagar indemnización alguna y los ciento y pico mil dólares que se ahorran de su ficha son los que se invertirán la próxima semana en hacer un fichaje. El jugador ya no se reirá más del ‘Estu’ con su mal juego, mal compañerismo y salidas nocturnas.
A primera hora de la tarde el club colegial sacaba una nota oficial informando de que ha suspendido «de forma cautelar de empleo y sueldo» al jugador «por falta muy grave». Sigo creyendo que es un paso más en la gestión de un despido al que sólo faltaba ponerle fecha y firma.
Wright no estará pues el martes frente al Blancos Valladolid, el partido más importante que ha jugado el club desde el del Cedevita de la Eurocup en marzo. Una derrota frente al colista sería un drama de proporciones bíblicas. El club entiende que dando este golpe en la mesa el vestuario y el cuerpo técnico reaccionarán.
Como te contó ayer por la tarde esta web Pepu Hernández presentó su dimisión el jueves, la directiva no se la aceptó y le ratificó en el cargo, pero también le dijo al entrenador que la actitud y comportamiento de Wright habían superado todo lo tolerable y que se le cortaba.
Pepu no está muy convencido de ese paso ya que tanto Wright como Simmons como Flores son tres jugadores de su misma agencia de representación, una estrategia de fichajes que ha resultado muy dañina para el ‘Estu’. Pero la directiva finalmente se ha impuesto y ordenó a José Asensio y a Nacho Azofra que comunicaran al alero su despido.
Azofra se presentó en el entrenamiento vespertino y habló con Wright, que ya no pertenece a la disciplina estudiantil.
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