Miguel Méndez fue presentado este viernes como nuevo seleccionador femenino tras el despido de Lucas Mondelo. El técnico ha explicado que su corazón «tardó muy poquito en aceptar» el cargo y que a su cabeza le costó «un poco más», ya que deberá compaginar esa tarea con la dirección del Ekaterimburgo ruso, al tiempo que ha explicado que no tiene «ninguna lista negra» y que las puertas de la Selección están abiertas para todas las jugadoras que «muestren su deseo» de vestir la camiseta roja.
Méndez añadió que «el Ekaterimburgo me ha mostrado su orgullo por poder trabajar con la Federación Española y les estoy agradecido porque para ellos seguramente no habrá sido fácil. Me hace ilusión volver a trabajar con muchas jugadoras con las que ya lo he hecho en categorías de formación y poner mi granito de arena en el baloncesto español. Tengo toda la ilusión del mundo y todo el trabajo para poder llevar a cabo esta tarea», apuntó.
Tras trabajas en la selección sub 20 y sub 18 en el pasado, Méndez conoce sobradamente a muchas de las jóvenes internacionales que se han incorporado recientemente a la Absoluta.
Al estar fuera del próximo Mundial, el reto es clasificarse para el Eurobasket 2023 a partir de las ventanas de noviembre. Méndez desea «hacer rápidamente el mejor equipo posible, escoger a las jugadoras que puedan hacer un equipo y ganar cada partido con el mejor baloncesto posible. Será un equipo reconocible que jugará a campo abierto, con muchos puntos a partir de la defensa y jugando juntas. Nuestro objetivo no puede ser más ambicioso. Paris 2024 queda muy lejos, lo primero es la ‘ventana’ de noviembre y habrá una continuidad en cuanto a jugadoras para llegar lo más preparados posibles a esta cita», destacó el nuevo seleccionador.
Todas las opiniones sobre Mendez son muy elogiosas y su gestión le avala, sin duda. Yo solo tengo un pero. No me gustó el juego de Ekaterimburgo en la Final Four de la Euroliga femenina el curso pasado. Tuvo muchos problemas ante dos equipos -Fenerbahce y Perfumerías Avenida- muy buenos pero con unas plantillas claramente inferiores. Recordemos que Ekaterimburgo cuenta con un roster que en la WNBA aspiraría a todo: Britney Griner, Breanna Stewart, Allie Quigley, Courtney Vandersloot. Jonquel Jones, Emma Meeseman, Alba Torrens, María Vadeeva…. Con una plantilla así, complicado es no ganar, aunque desde luego hay que alabar su buena gestión con tantas estrellas, pero el juego dejó bastante que desear. Pero, bueno, tiene dos años por delante para hacer un equipo competente, sumando a veteranas como Torrens, Ouviña, Astou, Gil…y las jugadoras de la generación del 95-96, que deben ser las que tiren del carro en el futuro. Buenos mimbres hay, esperemos que todos (y todas) se pongan las pilas
y no hay entrenadoras????
mama mia q mundo este, que pena
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