Análisis: el Maccabi peleará por repetir presencia en unos playoff que se han puesto muy caros; el Zalgiris, a luchar contra los pronósticos

La Euroliga se ha puesto tan cara por el alto nivel medio y lo que han mejorado sus plantillas cuatro equipos que no entraron en playoffs el pasado año, Efes, Panathinaikos, Armani Milan y Estrella Roja, que hay otros proyectos llamados a sufrir. El Zalgiris fue la revelación y el Maccabi estuvo sólido, especialmente en la segunda vuelta, y se metió. Ambos lo tienen difícil para repetir aunque hay que añadir que el equipo israelí y el lituano están buscando un fichaje para completar la plantilla y eso puede darles un salto en los pronósticos si aciertan con un nombre importante.

Los de Tel Aviv han decidido apostar por renovar a sus pesos pesados con contratos al alza y así ataron la continuidad, primero y especialmente ya en marzo, de Lorenzo Brown. Luego las de Wade Baldwin, Colson y Nebo, el cuarteto vital de la pasada campaña. Luego, los cupos israelíes para su liga y la tercera unidad, Menco, Cohen, y los de la segunda, DiBartolomeo y Sorkin. Y no continúan secundarios como Hilliard, Hollins y Adams, además de un Poythress lesionado muchos meses.

Así ha quedado la plantilla del conjunto macabeo:

El Maccabi ha hecho cuatro incorporaciones que deben tener más minutos en varios casos que los que se fueron. Curiosamente, dos llegan desde el Valencia Basket, el pívot Jasiel Rivero y un 3-4 como James Webb. Rivero se une a Nebo y Sorkin, un trío interior con movilidad y no mucha anotación pero fuertes y que hacen daño bajo el aro.

Pero Katash, que sigue como entrenador, puede echar de menos un 2,15 en diferentes momentos de la temporada. Colson estaba un poco solo como alero grande y Webb debe ayudar ahí, como puede hacer de ala-pívot abierto. Esta posición es la más débil del equipo, un refuerzo en ella parece pertinente para dar un salto global como equipo. Por fuera, Brown y Baldwin jugarán 26 minutos los días importantes pero con Blatt y Cleveland da la impresión de haber encontrado dos buenos suplentes.

El Zalgiris se movió con rapidez al principio del verano con los fichajes de Brady Manek y Mitrou-Long más la continuidad de un gran base como Keenan Evans, lesionado el pasado noviembre en la rodilla y ya recuperado. Ampliaron contrato a Smits y Ulanovas y hubo acuerdo para ejercer el +1 de Brazdeikis. Así que el plantel tenía muy buena pinta.

Una pena perder a ese jugador pues el Zalgiris estaba muy compensado con él para hacer de escolta y alero, como Manek puede ser un alero alto y un ala-pívot y Smits, un ‘cuatro’ y un falso ‘cinco’. Esa polivalencia ya les vino bien el año pasado y parecía oportuna ahora pues su rotación es más corta ya que Dimsa o Butkevicius son muy secundarios en la Euroliga. Fichar un jugador para el perímetro parece urgente.

Así ha quedado la plantilla del equipo lituano:

Es a priori la plantilla más floja junto a la del Alba Berlín en cuanto a nombres se refiere. El rendimiento superlativo del pasado año parece difícil de repetir salvo que lleguen fichajes y Evans, Hayes y Smits, los pesos pesados del equipo, ofrezcan un nivel excelso. Y se sume alguno de sus jóvenes. Lekavicius y Ulanovas siempre ayudan, a ver si aciertan con Manek y Mitrou-Long mejora respecto a la pobre imagen ofrecida en los mess que estuvo en el Armani Milan.