Entrevista a Ignacio Triana, presidente del Estudiantes: «La ampliación de capital ha sido decepcionante pero nuestro presupuesto es viable con el objetivo de ascender»

El Movistar Estudiantes cerró la semana pasada el proceso de una nueva ampliación de capital pensada para dotar de más solidez económica a la sociedad anónima deportiva que sostiene todo el organigrama deportivo. Se planteó la cifra de 5 millones de euros ante el interés declarado de diferentes inversores dispuestos a acudir con dinero a esa ampliación, pero luego no llegaron y finalmente han sido 630.000 euros lo recogido.

De ellos, 500.000 los puso Ignacio Triana, presidente de la entidad colegial desde el pasado julio. En esta entrevista con nuestra web desgrana la situación económica del club y los retos que afrontan.

-Ha calificado de decepcionante este proceso de ampliación de capital, no sé si por la cifra o por cómo se ha desarrollado.

No es nada fácil que entre capital de fuera del que ya está dentro de un club a una entidad, se ha visto en nuestro club y en otros. El baloncesto no es un negocio como tal, como se entiende en términos de rentabilidad. Es nuestra pasión, lo que nos gusta a los que estamos dentro, pero no es un negocio. ¿Por qué buscábamos 5 millones de euros? Primero de todo porque los necesitamos y segundo, porque hubo quien nos manifestó que estaba dispuesto a ponerlos. Entonces, ¿por qué poner una cifra menor? Si alguien hubiera venido con 5 millones, bienvenido y luego podría ser el máximo accionista. No ha sucedido, por eso la califico de decepcionante, sólo hemos suscrito el 12 por ciento del capital pretendido.

-A partir de aquí, ¿qué pasos se pueden dar?

Nos toca gestionar lo que hay, me gustaría que hubiera una realidad distinta pero es la que es.

-En estos tres últimos meses, ¿ha habido algún momento donde ha visto que era real, factible el que llegara un inversor con 4-5 millones a hacerse dueño del club?

Bueno, hay quien lo ha dicho públicamente además de en privado. Las posibilidades que yo le daba han ido cambiando a lo largo de las semanas y según se acercaba la fecha de cierre de la ampliación, mi opinión ya era más pesimista.

-Cuando dice toca gestionar lo que hay, entiendo que significa vivir con los recursos ordinarios de cualquier club: ticketing, sponsor principal, pequeños patrocinios, club de empresas, etc. ¿El presupuesto de esta temporada está asegurado con todo ello o se prevén turbulencias?

Sí, el presupuesto está atado y es viable si hacemos lo que venimos haciendo, ser muy hormiguitas, valorar cada euro que entra y gastar muy bien cada euro que sale y ser ahorrativos en lo que es posible. Con lo que generamos y el dinero de la ampliación de capital no estamos sobrados pero da para poder cumplir el presupuesto y pagar el dinero a Hacienda que nos toca cada año. Hemos mantenido el gasto para el equipo masculino y femenino. Es un presupuesto viable para intentar ascender.

-En estas fechas siempre llega un momento crítico para Estudiantes como es el pago anual acordado con la Agencia Tributaria.

Si no se ha hecho ya la transferencia, se hará esta semana. Es un pago de 1,1 millones de euros que permite rebajar la deuda de ocho millones y pico a siete en cifras redondas. Les pedimos que nos dieran unas semanas más porque estábamos en plena ampliación de capital y podría haber una situación económica y accionarial distinta, lo entendieron, no ha sucedido y ya está, se paga lo que corresponde como no puede ser menos porque no pagar a Hacienda cumpliendo el calendario de pagos sí que pone en serio riesgo a Estudiantes.

-Pero son 7 millones que van a seguir condicionando mucho los presupuestos anuales del ‘Estu’.

Nosotros si seguimos con una gestión económica rigurosa, con lo que generamos con nuestra actividad ordinaria, podremos hacer frente al pago de la deuda y tener un presupuesto aceptable. Para tener un presupuesto mayor vía ingresos y poder dedicar más dinero a lo que sería nuestra actividad de negocio normal, el baloncesto, el gasto en plantillas y cantera, necesitaremos ingresos adicionales. Como desgraciadamente las ampliaciones de capital no son el camino, se ha visto, buscaremos otras fórmulas. Y en ello estamos, pero no es algo fácil ni rápido.

-Tienen a Movistar como patrocinador principal y un buen número de sponsors también al lado, algunos desde hace muchos años. ¿Su continuidad está garantizada?

Nuestros patrocinadores son algo de lo mejor que nosotros tenemos junto con nuestra gente y aficionados. A mí no me gusta hablar de Estudiantes como marca sino como un sentimiento, unos valores de lucha, de ser irreductibles y ellos comparten esa idea, ese sentimiento de ser un club especial, con baloncesto femenino, inclusivo, escuelas, etc Por eso no son simples patrocinadores sino socios, compañeros de viaje. Todos han renovado estos años, con Movistar al frente, y siguen pese al descenso a la Leb.

-¿El objetivo es ascender a la ACB aunque suponga más gasto estar en ella?

Nuestro lugar natural por historia y afición es la ACB, la máxima categoría. ¿Cuándo? Espero que este próximo año. ¿Cómo sale eso a nivel económico? Pues es más caro, pero también generas más ingresos. Así que sería ascender y estar con un presupuesto bajo, ni siquiera de media tabla pero es donde debemos estar, en la ACB y dar esa satisfacción a nuestros aficionados.

-Descendió un club histórico como Estudiantes y el pasado verano, dos clubs de amplio presupuesto y que llevaban años muy buenos en la ACB como el Andorra y el Burgos. Es decir, no por tener más o menos presupuesto o más o menos aficionados en la grada logras tus objetivos, la forma de gestionar importa.

Nosotros el año pasado éramos el mayor presupuesto de la LEB y quedamos terceros. Este año somos el tercer presupuesto, no lejos del cuarto, y veremos cómo acabamos. Espero que primeros. Porque no depende de los euros que gastes sino de que la pelota entre y hagas las cosas bien. Andorra y Burgos tienen más dinero que nosotros y veremos si logran subir. Yo en Estudiantes me siento un gestor y, como hago en mis negocios, busco saber delegar en mi gente, en mis equipos de trabajo. Estoy encima pero delego. En Estudiantes, mi confianza en Pancho Jasen como responsable deportivo es máxima, yo tuve una reunión con él y luego con el entrenador para transmitir lo que yo esperaba, un equipo entregado y trabajador, que puede perder un día pero por eso, porque la pelota no entra, no porque el rival ha sido más intenso, trabajador o ambicioso.

-Han tenido que moverse ya por una lesión en el equipo femenino. ¿Hay margen de maniobra económica en el masculino para hacer alguna incorporación si hubiera alguna lesión importante o se considerara necesario un refuerzo? Sus dos principales rivales, Andorra y Burgos, ya han acudido al mercado y la temporada pasada las tres incorporaciones que hizo el Girona de octubre a febrero fueron la clave de su ascenso.

Tenemos una plantilla de 12 jugadores, estoy muy contento con ella, vamos colíderes con otros tres equipos y uno nos dio una lección en la primera jornada, el Lleida. Mucho respeto a todos ellos. Tenemos cuatro canteranos en la plantilla y eso nos deja satisfechos. Cruzo los dedos para que no haya lesionados, pero si sucede cualquier cosa y la dirección deportiva nos pidiera algo estos próximos meses, habría dinero para moverse.

El pasado mayo hubo controversia con la Federación Española a cuenta de la organización de la fase de ascenso, que fue en Girona y no en Madrid pese al deseo de Estudiantes de ser el anfitrión. ¿Está en vuestra cabeza la idea de ser la sede y el club organizador esta temporada?

Yo estuve en Girona en esa final a cuatro y fue una bonita fiesta del baloncesto. Para la ciudad organizadora es una gran oportunidad de tener un buen evento. El nivel de la Leb Oro ha subido los últimos años y el ascenso se ha complicado para todos. Ojalá no la juguemos porque hemos sido primeros y ascendido directamente, pero no somos tontos, sabemos que es algo difícil. Así que de momento lo que nos toca es trabajar y presentar a la Federación un proyecto y una pista acorde, si no la tienes, surgen los problemas como se vio hace unos meses. Madrid tiene todos los ingredientes para ser sede y un aspecto fundamental para el desplazamiento de las aficiones como es la situación geográfica, venir aquí en tren o autobús es más fácil que a otras ciudades. Así que lo que nos toca es estar preparados para pedir ser la sede en caso de que no seamos primeros.

-Me gustaría acabar casi volviendo al principio. Sé que no quiere mencionar nombres concretos pero es que ellos mismos han hecho público estos días, tanto Carlos Avenza como Pedro Fernández, del Grupo Hereda, que han estado interesados en meter mucho dinero y comprar acciones, aunque luego se han retirado. ¿Pueden regresar estos próximos meses, ellos u otros? ¿Están abiertos a incorporar nuevos accionistas? Me llegan informaciones de que va a haber movimientos otra vez en los próximos meses.

Es una decisión que tendría que tomar la junta de accionistas, no yo. Yo soy el máximo accionista pero no tengo todo el poder de decisión, como es lógico. Cualquier propuesta que nos hagan llegar, se estudiaría. Nos hemos reunido con varias personas interesadas, muchas no han trascendido y es bueno que haya sido así porque estos procesos hay que llevarlos privadamente. Al Estudiantes le hace falta dinero, esto es una obviedad. Pero también es una realidad que abrimos un proceso de ampliación de capital y no acudió nadie de los que se acercaron pidiendo ese proceso precisamente para invertir. Cabría preguntarse entonces por qué ahora sí y antes no. Además, quiero resaltar una cosa: este proceso de ampliación y poner al club en el foco de controversias o redes sociales ha tenido una pega fundamental que yo he vivido y sufrido desde dentro como es la debilidad institucional. Es decir, no es fácil negociar, presentarte ante un estamento o ante quien sea porque tarde o temprano te dicen ‘bueno, vamos a ver cómo acaba este proceso y luego hablamos’. Es un contexto que no hace ningún bien a la entidad. ¿Si habrá de nuevo inversores interesados en comprar? Yo no tengo una bola de cristal, veremos, sí digo que estos devaneos hacen daño a la institución y son peligrosos.