Tres meses jugando a tirones, siendo irregular y no hay forma de ver un Barcelona convincente. Sí, ganó en la pista del Real Madrid, pero los blancos tenían muchos lesionados. Al Valencia Basket y lo mismo, los taronja tenían cinco lesionados, varios muy importantes en sus esquemas.
En la Euroliga las derrotas en casa contra Zalgiris y Efes fueron sendos avisos que llegaron después de perder en Belgrado encajando 90 puntos y dando una sensación de no poder competir por el triunfo. En Bamberg, se dejaron remontar 26 puntos por el Brose en otra demostración de nula solidez.
Luego han llegado dos derrotas más contra CSKA y Fenerbahce, de esas que dejan sensación de impotencia. En Moscú estuvieron en el partido 36 minutos y cayeron en un gran parcial en la recta final. Avisados por estos tropiezos y con el campeón turco enfrente, otro batacazo. Gran primer cuarto con 28 puntos y luego 40 más sólo en los tres siguientes y sin poder con su defensa hacer nada en los últimos 15 minutos.
Como colofón, derrota en casa nuevamente contra el Iberostar Tenerife en la prórroga recibiendo 77 puntos en el partido y 93 tras el tiempo extra. 13 rebotes ofensivos y muchos puntos tras ellos del equipo lagunero, como luego lamentó Sito Alonso.
92 les metió el CSKA con el entrenador lamentando lo endebles que habían sido y cómo habían cometido los errores que previamente había dicho que no debían hacer, pérdidas y rebote, dos grandes defectos ese día. Contra el Fenerbahce, 83 puntos recibidos y 11 pérdidas por apenas 5 los de Obradovic y un tremendo 73-96 en valoración. Pierre Oriola comentó que no habían respetado el guión del partido que habían preparado. Pasan los meses y el rebote sigue sin cerrarse y ni Tomic ni Seraphin cierran el aro al riva, menos Oriola con su 2,05.
De 11 partidos en la Euroliga han jugado 7 en el Palau y perdido cuatro. Curiosamente, ganaron de paliza a Panathinaikos, Olympiacos y Maccabi, así que capacidad de jugar bien también tiene este Barça. Pero esos rivales ayudaron mucho con un mal día, pero fueron triunfos claros. También el espejo en el que mirarse.
Otro aspecto clave parece que será ver mejor a muchos jugadores: los equipos crecen a medida que más están en su mejor momento. Heurtel ha bajado, Hanga no ha despegado aún, Claver no está, Ribas y Koponen, muy irregulares, Tomic más blando que nunca…