Siguen pasando los días y en vez de llegar el sosiego, cada declaración pública desde la FIBA sigue transmitiendo radicalidad. Tras avisar de que echarán a 14 potentes selecciones del Europeo del 2017, siguen amenanzando con apartar a España y Lituania de los Juegos de Río de este próximo mes de agosto. Así lo repite Kamil Novak, secretario general de FIBA Europa, en una entrevista en el Corriere della Sera, donde se ratifica en lo dicho el pasado fin de semana.
“¿Si se puede dejar a España fuera de los Juegos Olímpicos? Sí, es una posibilidad”, indica Novak. Aunque también reconoce que sería algo duro de hacer: “Sería una decisión difícil y a mí no me corresponde tomarla. Seguimos abiertos al diálogo”. FIBA Europa quiere dar ese paso y solicita que sea el board central de FIBA Mundo quien lo ratifique como organizadora del torneo de baloncesto en los Juegos de la mano del Comité Olímpico Internacional.
Además, Novak sigue propugnando que FIBA actúa así contra clubs y Euroliga porque quieren un torneo más basado en criterios deportivos para el baloncesto europeo que no uno sostenido por el poderío económico de los equipos más fuertes: “Queremos unificar las competiciones con un criterio democrático y basado en la solidaridad. Todos los equipos deben tener la opción de soñar con progresar y competir al máximo nivel. Así se rige la Champions de fútbol, ¿por qué no seguir su ejemplo?», se pregunta.
Novak recuerda que «la Federación Internacional es la institución que gobierna el baloncesto. No vamos a permanecer como rehenes de esta situación», en referencia al control de la Euroliga de la principal competición de clubs continental cerrando las puertas a otros posibles participantes.
Mientras Jordi Bertomeu está en Italia para apoyar a los clubs de ese país que se habían decantado por jugar Euroliga y Eurocup. El máximo responsable de la Euroliga advierte a su vez de que no cederán y de estar convencidos de que sólo ellos pueden a la larga ganar este conflicto.