El Barcelona llevaba seis victorias seguidas y dando una creciente imagen de solidez, buen juego, jugadores al alza… Pero llegaron a la pista del Olympiacos y disputaron un pésimo encuentro. Derrota por 59-52 y sin opción de pelear por la victoria. Con 17 pérdidas y apenas 17 canastas encestadas en 52 lanzamientos no se puede competir a este nivel. El equipo de el Pireo ganó sin brillantez alguna, simplemente siendo menos malo que su rival.
El Olympiacos dominó la primera mitad, marcada por el esfuerzo defensivo de ambos equipos y por el desacierto en ataque. Al descanso había un 32-25 no porque los griegos hicieran nada especial sino porque las 11 pérdidas del Barça impedían a los visitantes llegar al aro en muchos ataques. Asimismo, chocaban contra el planteamiento del rival y la bola consumía segundos circulando por fuera y sin que pudiera llegar en condiciones a los interiores.
La diferencia siguió estabilizada (54-44, min. 35) y el Olympiacos llegó a los instantes finales con la victoria en la mano ante la incapacidad barcelonista para apretar algo el luminoso. Sólo lo consiguieron a minuto y medio con el 56-51 aunque su rival se encargó enseguida de aclarar el panorama con una canasta de Birch bajo el aro y al perder Rice la bola en el ataque siguiente.
59 – Olympiacos (21+11+17+10): Spanoulis (15), Mantzaris (5), Lojeski (1), Printezis (7), Milutinov (2) -cinco inicial-, Birch (7), Papapetrou (8), Green (9), Papanikolaou (-) y Hackett (5).
52 – Barcelona (16+9+13+14): Rice (11), Oleson (2), Perperoglou (4), Holmes (13), Tomic (4) -cinco inicial-, Koponen (6), Dorsey (9), Vezenkov (3), Eriksson (0).