El acierto del fichaje de Edy Tavares por el Real Madrid y su buen funcionamiento están fuera de toda duda. El pívot se ha convertido en un jugador imprescindible y sus 221 centímetros le convierten en una pieza muy apetecible.
Sus dos años y unos meses en la NBA no fueron satisfactorios pero el regreso a la liga estadounidense es una posibilidad sobre la mesa.
En el club blanco son conscientes de ello, pero también existe el riesgo de que el CSKA aparezca en escena. El equipo ruso piensa en Tavares como gran aspiración este verano conocedores de que el intento de un agente por reclutar al pívot ha originado un gran malestar en su agencia de representación de siempre.
Sacarlo del Madrid, donde tiene un año más firmado, no sería fácil para el CSKA pero valorarían ir a por Tavares de tener la oportunidad, según hemos sabido.
Más factible es para una franquicia de la NBA contratar al jugador caboverdiano abonando su cláusula. Se fue allí muy joven desde el Gran Canaria. Ahora está más maduro y llegaría con un salario mucho más alto, algo que siempre ayuda a tener luego minutos.