Juan Carlos Mitjana se sincera en una interesante entrevista concedida al periodista Julián Felipo en Mundo Deportivo. Después de 29 años arbitrando y con 853 partidos ACB a sus espaldas, la liga prescindió de sus servicios el pasado verano y mientras pelea porque la Justicia reconozca su despido como improcedente deja varios titulares llamativos.
«Pensaba que si alguna vez me dirían adiós lo harían con tiempo para poder prepararme anímica, personal y profesionalmente. No como lo hicieron: me citaron un 2 de agosto por la mañana y en cinco minutos me lo comunicaron», asegura el barcelonés.
Asimismo, Mitjana reconoció sentirse «bastante maltratado» durante su última campaña en activo y cree saber los motivos que llevaron a ello: «A los miembros del comité técnico no les gustan las personas que puedan tener personalidad, que tengan ideas propias. Les interesan más la gente sumisa».
Además, el catalán considera que sus ex compañeros «tienen un gran respeto al sistema». «Evidentemente, hay un malestar pero los árbitros no se atreven a manifestarlo por miedo a represalias, máxime cuando a final de esta temporada acaba contrato el 90% del colectivo, lo que hace que todo el mundo esté callado. Eso significa que no tendrán libertad fuera de la pista. Dentro de la pista espero que la tengan aunque lo dudo».
Finalmente, Mitjana califica como «leyenda urbana» la recepción de cualquier tipo de consignas desde instancias superiores a la hora de dirigir un encuentro, aunque apostilla: «Sí que es verdad que cuando un árbitro tiene carácter y pita cosas importantes por las que puede perjudicar a algún equipo, deja por un tiempo de pitar a ese equipo. Te puedes plantear si es correcto o no pero eso es real. A algunos les puede afectar a la hora de tomar decisiones, pero no se puede decir que los árbitros reciban mensajes sino que los que designan tienen su ‘línea editorial'».