Las horas siguientes a la dimisión de Juanan Orenga están siendo dolorosas para todos los protagonistas de esta triste historia que ha sido finalmente el Mundial de España. Los hermanos Gasol la han comentado esta tarde en Barcelona. Pau señala que «la aceptamos, no es una cosa de los jugadores, es una decisión personal y no sabemos si ha habido alguna cosa más. No es momento de buscar un culpable, no hubiéramos perdido si solo hubiera un responsable. Es cosa de todos, en deporte a veces se señala demasiado al entrenador, no es justo que sea así».
Además, afirmó que es una decisión «respetada» que podía pasar «ahora, después, o no pasar». «Quien venga, vendrá. Nosotros no tenemos la última palabra en la selección de un seleccionador. Nos tenemos que centrar en lo nuestro, Marc en Memphis y yo en Chicago, primero disfrutar estos días, y después ya veremos qué pasa en verano y con la selección», dijo el mayor de los Gasol.
Asimismo, animó a mirar ya al futuro y olvidar el batacazo: «Lo que está hecho, hecho está. No vale la pena mirar atrás, solo hacia adelante. No podemos cambiar nada de lo que se ha hecho para cambiar un resultado. Tenemos cosas por las que estar contentos y felices, con momentos increíbles por vivir todavía», concluyó. Por último, no quiso mojarse sobre si volverá o no a la selección.
Mientras, Marc Gasol respondió rotundamente que «no» cuando se le preguntó si Orenga era el culpable del fiasco de la seleción: «No es el principal responsable. Hay que hacer autoanálisis y ver qué no hicimos bien cada uno. Hay muchos factores, como que Francia lo hizo muy bien y nosotros no, con tan pocos puntos que hicimos es complicado ganar. El entrenador tiene una parte de responsabilidad, pero los jugadores también. Yo no estuve acertado».
En este sentido, Marc añadió que no se debe buscar un solo culpable, sino buscar soluciones. «He estado aislado del mundo deportivo estos días. Las dos noches antes del partido no descansé por motivos personales, y después de dos noches durmiendo dos horas el cuerpo no está en condiciones óptimas pero quería ayudar a mis compañeros», apuntó sobre su desacierto contra Francia, y es que fue padre de su primera hija el día previo.
Sobre quién desea que sea el nuevo seleccionador, Marc fue claro: «»Nuestra tarea es jugar, buscar o no un entrenador concreto no es nuestro trabajo».
Por su parte, Orenga dijo anoche en Onda Cero que «tenía fuerzas para seguir pero hay que tener la cabeza fría. Lo mejor es dar un paso al lado». Asimismo, el ya ex seleccionador añadió que «no quiero ser un problema para el baloncesto español sino ayudar a encontrar soluciones con mi marcha. Hemos intentado llevar al equipo hasta la meta y no lo hemos conseguido. La Federación tiene un proyecto muy bonito para los próximos años y debe seguir su camino. Yo ayudaré desde otro puesto».