La NBA llevaba tres años intentando acabar con el ‘tanking’ (competir mal para acabar mal clasificado) que realizan varios equipos cada temporada, con mucha intensidad unos cuantos más en los últimos meses de cada curso cuando ven que no entrarán en los playoff.
Así, los peores se llevan las primeras elecciones del draft con vistas a reforzarse para el año siguiente, pero muchos partidos quedan devaluados porque un equipo ‘pasa’ de buscar la victoria.
La NBA ha aprobado sortear las cuatro primeras posiciones del draft y no tres como hasta ahora. Además, reduce el porcentaje de opciones de que el peor equipo se lleve el número uno del draft. En realidad, de que los tres peores se llevan las tres primeras elecciones.
A partir de 2019, los tres peores equipos de cada año tendrán las mismas opciones de llevarse al número uno, un 14 por ciento. Hasta ahora, el peor clasificado tenía un 25 por ciento, un 19,9 al segundo peor y un 15,6 al tercero peor. Esto supone que ya cualquiera de los tres peores equipos del curso tenga menos opciones de llevarse el ‘premio gordo’ del draft. Asimismo, el cuarto, quinto, sexto, etc equipos peor clasificados suben también en el porcentaje de opciones de optar al número uno.
Por otro lado, Adam Silver tendrá la potestad de multar a aquellas franquicias que recurran a los habituales descansos sin mediar una lesión. Ahora es muy habitual que los jugadores con más minutos y las estrellas dejen de jugar muchas semanas algún partido para descansar. Especialmente cuando juegan dos noches seguidas. Las televisiones se quejan de que lo hagan en partidos retransmitidos a nivel nacional.