El Central Board de la FIBA se ha reunido en Estambul y ha aprobado este fin de semana una serie de cambios en los torneos internacionales de baloncesto. Dos son especialmente significativos. El primero es que, como se anunció hace meses, los mundiales pasen a disputarse en años impares y sin coincidir con los de fútbol. Es decir, que tras la Copa del Mundo de España de este verano, la siguiente será en el 2019.
Esto implica también cambios en el Eurobasket. Era un torneo que se veía disputando cada dos años, una tradición ya. Pues bien, ahora serán cada cuatro años. A partir del 2017 habrá que esperar al 2021 para el siguiente Europeo.
Si a esto unimos su anterior anuncio de noviembre relativo a que habrá partidos clasificatorios para estos torneos en plena temporada, y no en verano como hasta ahora, supone tener una amplia polémica por delante. Tanto las ligas nacionales como la Euroliga se pronunciaron en contra de interrumpir sus competiciones. Desde FIBA Europa, algunas federaciones recordaron la numerosa presencia de jugadores continentales en la NBA que muy difícilmente serán cedidos a sus selecciones para jugar durante la temporada.