No es que sea una gran sorpresa el anuncio, pero sí lo tajante que suena a seis meses de que tengamos un nuevo conflicto en el baloncesto. Un nuevo lío que en nada ayuda a este deporte y menos aún al aficionado.
Al igual que la NBA, la Euroliga tampoco piensa parar su competición cuando se disputen partidos de selecciones en las llamadas ‘ventanas FIBA’. Desde el próximo noviembre la Federación Internacional celebrará partidos clasificatorios para la Copa del Mundo del 2019 parando las ligas nacionales. Sucederá ese mes, luego en febrero y de nuevo en junio.
En una entrevista en la cadena Ser, Jordi Bertomeu recordó que «nuestros clubs aprobaron en una asamblea que no pararían». Así que hacerlo implicará que se apruebe en asamblea a primeros del próximo mes de julio, cuando aprueben el calendario para la próxima temporada.
Pero la postura tajante del CEO de la Euroliga no abre las puertas a pensar en un cambio de aquella decisión. Además, Bertomeu despreció sin miramientos a la FIBA: «El problema no lo podemos tener nosotros, el problema lo tiene quien ha planteado un calendario con una competición absurda en la que se sabe que los mejores jugadores no van a estar».
Además, recordó que «no puedo entender cómo se va a exigir a los clubes europeos algo que no se le pide a los de la NBA. Esto no lo va a entender nadie. No tiene sentido el proyecto en sí mismo, sería bueno que se reconsiderara, llevamos cuatro años diciéndolo y planteando alternativas, pero no parece que haya receptividad por el otro lado».
En otro orden de cosas, admitió que puede haber cinco equipos españoles la próxima temporada si se dan las circunstancias aunque les creará problemas logísticos, televisivos y de calendario.
También comentó que ampliarán en un futuro a 18 ó 20 equipos el torneo pero seguirá en formato de liga de todos contra todos. Asimismo, estudian que pueda haber algún descenso a la Eurocup y que de esta competición suba algún equipo.