Como se sabe, la actividad institucional de la ACB está paralizada por la división de los 18 clubs en dos grupos de 12 y 6 que difieren en los plazos y formas para acabar con la etapa Portela.
El veterano presidente de la ACB, de 77 años y 28 en el cargo, tiene que dejar paso a una nueva era, pero el ‘Grupo de 12’ desea que sea ya y dando el poder a una comisión ejecutiva de ocho de ellos. Mientras, el ‘Grupo de los 6’ cree que esa comisión no puede tener poderes ejecutivos porque los estatutos de la ACB hablan de una comisión delegada con funciones informativas y no ejecutivas. Además, opinan que Portela debe irse por acuerdo y votación de los 18 clubs.
Mientras se resuelve este asunto no pueden afrontarse modificaciones de mayor calado relativas al sistema de contratación y de sustitución de los actuales cupos o las relativas al sistema de competición. Pero tampoco se ha dado rango de oficialidad a un cambio vital relativo a la Euroliga.
Para evitar dejar sin Euroliga a un Valencia, Bilbao, Estudiantes, Gran Canaria o Cajasol que quedara por delante de alguno de esos cuatro en la ACB se acordó que si alguno jugaba las semifinales, iría a la Euroliga. ¿Van a respetar los clubs ese pacto?