Consciente de que tiene muchos asuntos importantes sobre la mesa, Francisco Roca quiere empezar a ejercer de forma inmediata como nuevo presidente ejecutivo. Ha sido votado a las 6 de esta tarde de forma unánime por los 18 clubs y toma las riendas de una Asociación de Clubs que quedó muy dividida desde julio del pasado año hasta estos días con el proceso vivido. Tanto con el que llevó a la destitución de Beto Agustí el pasado septiembre como con las fallidas votaciones hechas o aplazadas en los últimos meses para elegir al nuevo máximo responsable de la ACB.
En las últimas semanas se ha intentado limar asperezas y se consiguió a partir de que Real Madrid y Barcelona alcanzaron un principio de acuerdo en torno al nombre de Roca hace un mes y medio. Luego el resto de clubs lo valoraron bien, pocos se mostraron reacios y finalmente todos asumieron que era un buen candidato y que el vacío institucional es dañino para la Asociación.
Ahora hace falta que Roca entre con buen pie y evidencia que esas ganas de trabajar son reales. No va a tener 100 días de gracia para ir conociendo el mundillo ACB. Hay que tomar muchas y variadas decisiones este mismo verano a nivel deportivo, ejecutivo, económico y televisivo.