El Baskonia aplasta a Olympiacos (86-54); el Unicaja peleó hasta el final pero no pudo con el Zalgiris (79-77)

El Baskonia aplastó al Olympiacos en una increíble segunda parte hasta tener ventajas de 30 puntos en el tercer cuarto y de 40 en el último. Al final, un 86-54. Es su octavo triunfo y son novenos en la clasificación, a una del octavo, el Khimki. Huertas no pudo jugar por enfermedad y entró el joven base Vildoza para ayudar.

El inicio fue de color griego, con un 0-8 y 7-13 y un 12-20. Pero mejoraron los locales mucho en el segundo (21-23), donde el Olympiacos apenas anotó 9 puntos y de un 25-29 se pasó a un 36-30. 4 de 16 triples los helenos y 1 de 10 el conjunto vitoriano en la primera parte.

 

Un 6-0 en la reanudación dio ya 12 puntos de ventaja al Baskonia. Shengelia puso el 48-32 y Voigtmann, el 53-36 con un triple en el minuto 25. El 56-36 era una fiesta en la grada. El 72-40, una locura.

Así hasta un 36-14 en el tercer periodo y haciendo sólo cuatro triples. La renta siguió subiendo un rato más y llegó a un tope de 86-49.

El Unicaja cayó en los segundos finales

El Zalgiris mantiene su gran ritmo de victorias y parece claro que se colarán en los playoffs. Derrotaron al Unicaja por dos puntos de renta y eso deja al equipo malagueño un poco descolgado de la octava plaza.

El equipo lituano dio la vuelta al marcador en el último cuarto tras ir por delante en el segundo y en el tercero equipo malagueño, que se fue con un 32-40 al descanso. En la reanudación, los de Jasikevius estrecharon la diferencia pero sin lograr superar a los visitantes.

Pangos puso con un triple el 59-58 al final, llegó el 68-64 para los últimos cinco minutos tras dos pérdidas de balón y desperdiciar Nedovic dos tiros libres y 72-66 para los tres últimos.

Los de Plaza supieron apretar atrás y llegar al último minuto vivos tras un triple de Suárez y una canasta bajo el aro de Augustine (76-73). Falló Ulanovas y bandeja de Waczynski. Micic erró uno de sus tiros libres y el Unicaja estaba dos abajo a falta de 13 segundos. El Zalgiris no hizo falta y confió en su defensa. McCollum se fue hacia el aro y se encontró con un tapón de Ulanovas que aseguró el triunfo lituano.

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