El Real Madrid ha quedado subcampeón y pensaba prescindir sólo de dos jugadores mientras que el Barcelona ganó la Liga y va a cambiar a media plantilla. Así son las cosas en los clubs de élite. El equipo blanco confía en su plantilla, en la mayor parte de ella, bastante joven en casi todos sus componentes. Sabe que necesita una estrella para los momentos calientes, y para eso esta Rudy (que cubre la salida de Singler), que será anunciado a principios de julio, y músculo en la zona.
La confianza en la idea de juego y en la plantilla es lo que ha llevado a proponer a Laso que amplíe su contrato hasta el 2014, un año más de lo que tenía firmado, como adelantó As el domingo.
Slaughter es uno y está fichado para suplir al blando, irregular y poco fiable Velickovic. Sí, mucho supuesto talento, pero mostrado en apenas diez partidos en tres años con la camiseta blanca. Además, para que Mirotic crezca necesita 28 minutos y toda la confianza. Y Velickovic tambié necesita confianza y minutos.
El serbio no iba a seguir y todavía es probable que se vaya. Además, Tomic tiene un año más firmado, pero el Madrid tiene la opción de cortarlo pagándole un dinero. El pívot croata no está a gusto ni con su protagonismo ni con el estilo de Laso, así que no le importaría cambiar de club.
Su débil papel en semifinales y en el último partido de la final hace que el club blanco estudie su salida para que llegue un pívot más sólido y rocoso.