Son demasiados años ya esperando al Valencia Basket. Viendo buenas plantillas sin apenas títulos en las vitrinas salvo la Eurocup del 2014. Grandes temporadas que luego se frustran en la Copa del Rey o en los playoffs. Es cierto que muchas veces compitiendo bien, cayendo en el quinto partido de semifinales incluso. Así que cada verano se valora al equipo taronja como una alternativa al Barcelona y el Real Madrid, si bien no se cumplen las expectativas.
¿Puede ser ésta la temporada para dar un salto hacia alguna final? Visto cómo ha quedado el Valencia Basket, parece que hay mimbres para ello. A la solvencia de Pedro Martínez en el banquillo se une nada menos que cinco fichajes para tener una plantilla de 13 jugadores, varios además muy polivalentes. Asimismo, Van Rossom está de vuelta tras diez meses fuera de las canchas por una complicada lesión.
El pasado curso el base belga no estuvo y a Guillem Vives le tocó coger mucho protagonismo. Diot empezó la temporada lesionado. Trias apenas jugaba y Lucic era muy irregular. Además, Sikma se lesionó igualmente en la recta final de la temporada.
Aparte de Dubljevic, siguen del pasado año Vives, Van Rossom, Diot, San Emeterio, Sato, Rafa Martínez y Sikma. A estos ocho jugadores se suman cinco fichajes. El único algo contestado ha sido el del pívot John Bryant, que llegó visiblemente pasado de peso. Está siguiendo un plan físico y dietético para perder unos cuantos kilos.
También en la pintura se apostó por dos cuatros muy distintos. Uno es Will Thomas, procedente del Unicaja, y será clave en defensa y rebote; el otro, un Pierre Oriola, ex del Baloncesto Sevilla, que mejora de año en año. Cada vez es más sólido y no le falta capacidad de anotación
Los otros dos refuerzos son en el perímetro. Como Oriola, Joan Sastre es un jugador joven y al alza. Puede tirar, rebotear, corre bien la pista y puede ayudar en defensa. La otra incorporación es Vladimir Jankovic, otro jugador todoterreno que debe aportar en los dos lados de la cancha. El alero nacido en Belgrado y también con nacionalidad griega debe ser el pegamento que haga que todo funcione en defensa y en ataque.
