Icono del sitio Encestando.es

El Iberostar repite presencia en la la semifinal tras derrotar con autoridad al Unicaja (88-78)

El Unicaja, un año más y van muchos, decepciona en la Copa del Rey. Caer eliminados en cuartos de final es lo habitual para ellos desde la final del 2009 salvo la semifinal del 2015. En cambio, el Iberostar sigue dando pasos para consolidarse entre los mejores. El año pasado jugó su primera semifinal copera y este curso repiten. Ganaron con mucha autoridad a un rival que maquilló un poco la derrota en la recta final ayudado por los tiros libres que erraba el conjunto lagunero.

No será fácil ahora para ellos avanzar más, pero ahí queda eso. Equipo de playoff y/o Copa las últimas temporadas y campeón de la FIBA Champions League en el 2017. Su plantilla y buena trayectoria sigue recibiendo premios y esta semifinal fue muy merecida pues fueron muy superiores al Unicaja. 9 de 19 en triples el Iberostar por 12 de 34 su rival, que firmó un 5 de 19 en la segunda parte. Además, un 35-23 en rebotes para los aurinegros.

Se llegó al descanso con un 44-36 después de que el equipo tinerfeño controlara el marcador desde el minuto 5. Su acierto en ataque, primero con San Miguel, luego con Abromaitis, y con un plan de juego muy claro le permitió coger 5-6 puntos de ventaja hacia el final del primer cuarto (25-20).

En el arranque del segundo subió esa renta a 8 con el 31-23 y sólo el acierto en el triple sostenía al Unicaja. Hicieron un 7 de 15 desde la línea de 6,75 que resultó vital. Por dentro, nada. No había forma de alimentar a Shermadini, dos puntos en la primera mitad por ninguno de Lessort. El 40-30 amenazaba con escapada del Iberostar pero la cosa quedó en ocho de desventaja para el cuadro malagueño en el ecuador del encuentro.

El equipo dirigido por Vidorreta demostró su solidez defendiendo bien su renta. Se puso un momento el Unicaja a cuatro puntos, pero enseguida volvió la diferencia a siete. Así hasta que un nuevo arreón dio al Iberostar una diferencia ya muy importante (64-51, min. 29). El Unicaja no encontró la forma de apretar el luminoso. En ataque no jugaron del todo mal, pero nunca pudieron imponerse en defensa.

El 79-63 a cinco minutos de la conclusión dejaba imposible el partido para los de Casimiro, que se iban quedando sin fe ni tan siquiera para intentar la remontada. De hecho la situación estaba más que controlada por el Iberostar con el 85-70 a dos minutos de la conclusión.

88 – Iberostar Tenerife (25+19+22+22): White (7), San Miguel (9), Beirán (10), Abromaitis (12) e Iverson (19) -cinco inicial- Staier (-), Richotti (-), Niang (4), Brussino (8), Bassas (16), Saiz (-), Gillet (3).

78 – Unicaja Málaga (20+16+20+22): Roberts (7), Fernández (13), Milosavljevic (16), Wiltjer (7) y Shermadini (8) -quinteto titular- Boatright (5), Salin (11), Díez (-), Waczynski (3), Lessort (3) y Suárez (5).

 

Salir de la versión móvil