En la madrugada del martes al miércoles comienza la temporada en la NBA. 30 franquicias muy renovadas en busca de una plaza de playoffs. Comenzamos el análisis del nuevo curso centrándonos en el Este, donde está Cleveland Cavaliers como mayor favorito a meterse en la final por este lado del cuadro. Chicago Bulls vuelve a ser la principal alternativa, aunque muy dependiente otra vez de cómo esté físicamente Rose.
Toronto Raptors y Atlanta Hawks se ha reforzado bien y mantienen a sus principales puntales para ser aspirantes a dar la sorpresa. Menos opciones les vemos a los Wizards y deben repetir presencia en los playoff los Celtics. Seguramente, los Knicks no volverán a firmar un año tan desastroso como el pasado aunque es difícil verlos como candidatos a nada que no sea pelear por el playoff.
Los Cavaliers acaban de renovar tras un largo culebrón a Tristan Thompson. También renovó en julio Kevin Love y a Shumpert. Por supuesto, sigue Lebron James. Y Mozgov, fichaje clave mediada la pasada temporada. Ellos más un Irving que se lesionó en los playoff componen un plantel brutal. Si le sumas a Varejao y JR Smith y los refuerzos de Mo Williams, el pívot ruso Sasa Kaun y el veterano escolta tirador Richard Jefferson, parece claro que son la plantilla más larga y compensada de toda la NBA.
En Chicago siguen todos los jugadores importantes y el cambio es en el banquillo, con Thibodeau fuera y un entrenador universitario como Fred Hoiberg (Iowa State) contratado. Rose, el renovado Butler, Dunleay y Noah es un gran quinteto inicio aunque Pau puede jugar de cinco y el francés salir del banquillo con el nuevo técnico. Mirotic, Brooks, Gibson y Snell son de nuevo buenos suplentes a priori. No es mejor plantilla que la de los ‘Cavs’ en principio. Si McDermott explotara…
En Toronto han hecho un equipo interesante al mantener a su trío estelar Lowry-DeRozan-Valanciunas y añaden como principal fichaje precisamente a Carroll para mejorar su perímetro. El veterano Scola les dará puntos en el puesto de cuatro y el otro refuerzo relevante es Corey Joseph, un base con buena mano. Es un equipo para aspirar a la final del Este si no sufren lesiones.
Washington Wizards ha perdido a Paul Pierce pero siguen con Wall y Beal como potente pareja exterior y con Gortat e Hilario como torres en la pintura. Deben entrar en playoffs sin problemas con otras piezas de nivel como Porter, Dudley, Humphries, Sessions y Webster.
Los Pacers recuperaron al final del pasado curso a George tras aquella infausta rotura de tibia y han cambiado el estilo del equipo al dejar irse a West e Hibbert. Sobre el alero más George Hill y el recién llegado Monta Ellis hacen un buen perímetro. Pero en la pintura son flojos a la espera de si Jordan Hill es fiable o no. Un debutantede 19 años como Myles Turner, un 2,11 que tira bien de fuera, es su apuesta de futuro.
En Detroit Pistons se lo juegan todo a que Drummond se consolide como una estrella de la Liga. Está bien rodeado con Marcus Morris, Anthony, Danny Granger, Ilyasova, Reggie Jackson… Tienen lesionado por ahora al prometedor Brandon Jennings y se espera que el alero Cadwell-Pope siga al alza.
Los Celtics siguen con su apuesta de acumular talento repartido en una rotación larga sin estrellas y con muchos jóvenes y jugadores de poca experiencia. Eso sí, añaden experiencia para repetir jugar en playoffs al contratar a David Lee y a Amir Jhonson. Ellos más los Bradley, Turner, Thomas, Oylink, Zeller, Sullinger o Crowder parecen suficientes para ser competitivos. Eso sí, eran un mal equipo desde la línea de tres y ese parece seguir siendo su defecto.
En Milwaukee se espera ver un juego atractivo y ser un equipo revelación. Ya lo fueron un poco la pasada campaña y ahora mejoran la plantilla con la llegada de Greg Monroe desde Detroit y con el joven alero Jabari Parker de vuelta tras la grave lesión de rodilla sufrida el pasado diciembre. A ellos hay que unir al griego Antetokounmpo y a John Henson, de quien se espera que explote y dé un gran salto al equipo. Bayless, Copeland y Middleton son tres buenos suplentes para hacer una buena temporada.
