Lejos de tirar la toalla, Gorka Arrinda se siente fuerte y así lo ha explicado en rueda de prensa. Pese a la delicadísima salud económica del Bilbao Basket y a que él mismo dijo hace tres semanas que no tienen dinero para hacer uno de los dos pagos fuertes a la plantilla de los dos firmados, el de este mes de enero. Asimismo, la búsqueda de un sponsor ha sido infructuosa y él, máximo accionista y consejero delegado del club vizcaíno, se ha mostrado abierto a irse si entra un grupo que sostenga el club y le compra su paquete accionarial. Finalmente, desde el próximo lunes los jugadores pueden irse si no hay garantías de pago. Y para colmo, Fotis Katxikaris, el entrenador de las tres pasadas campañas, ha demandado al club por los 400.000 euros que se le adeudan.
Pues bien, pese a este negro panorama, Arrinda no se arruga. Dice que hay conversaciones con dos fondos de inversión de capital americano que estarían «interesados en financiar» al club vizcaino «los próximos 4 ó 5 años». Por ello, «el futuro del club no tengo duda de que no corre peligro», explica.
El directivo ha dicho que no tiene intención de desprenderse de sus acciones mientras no quede garantizada la viabilidad del equipo. «No voy a vender mis acciones si no se garantiza el proyecto del club. Primero, está el club y luego, mi situación personal. Quien venga tienen que aportar gestión y economía», resaltó.
Sobre si la Diputación les da la espalda, Arrinda indica que «hemos pasado de ser un proyecto estratégico para Bizkaia a ser un club privado. ¿Si nos han abandonado? Eso lo tienen que contestar otros. Sólo puedo agradecer el apoyo que nos han dado. Hemos pasado a no tener 3,5 millones en caja y cero deuda con Hacienda, si tuviéramos el convenio que en su día tuvimos estaríamos con liquidez; la mayoría clubes tienen la deuda aplazada con Hacienda, deben seis y ocho millones y siguen fichando.Tenemos un futuro único porque hay deuda cero con Hacienda, la deuda la tenemos con quien no queremos tener, los que se han partido la cara por este club y por la ciudad, los jugadores». Asimismo, añadió que «cuantos menos estemos, más complicado será. Nunca hemos pedido dinero a las instituciones, hemos pedido apoyo».
Arrinda ha apuntado también que ha mantenido conversaciones con un «grupo empresarial vizcaino» para su posible entrada en el accionariado, aunque «de momento han sido simples intenciones». Eso sí, siempre y cuando él esté al frente del Bilbao Basket.
Porque es sabido que la Diputación y algunos inversores y empresarios interesados en reflotar la entidad prefieren que se vaya, si bien él lo niega. «Siempre hemos estado abiertos -expone Arrinda- a quien quiera colaborar aportando garantías económicas, cuanto más sumemos más fácil será estabilizar este proyecto, Si viene gente, mejor, estamos encantados de recibirles».
Arrinda ha confirmado que los jugadores siguen teniendo las «puertas abiertas» hasta el día 30 de enero para salir del club, aunque por ahora no contempla la posibilidad de que «ningún jugador se marche». “Hay que agradecer a los jugadores la honestidad, paciencia y respeto que están teniendo con esta ciudad, el consejo y el club. Tenían ofertas de distintos clubes y han decidido quedarse aquí», señaló el consejero delegado.