Yo mismo no tenía nada claro el tema de los ‘cotonous’ y qué pasaría con esos españoles vía nacionalización como Hopkins, Fisher, Van Lacke, Sinanovic, Prigioni, Savané y Oleson. Si jugarían como comunitarios o como canteranos.
Pues bien, estos nacionalizados serán admitidos como cupos de canteranos. No se formaron aquí ni pasaron tres años entre los 16 y los 20, así que no se les debería considerar canteranos. Pero los clubs defendieron una serie de nombres como jugadores con unos derechos adquiridos y como excepción a la regla. El sindicato de Llorente no lo admitía, pero se quedó en minoría y se incorporaron al acuerdo como excepciones a la regla.
El Unicaja considera que Lima es también cupo por este mismo camino, pero ni ellos mismos lo tienen claro y han preguntado a la ACB si es cupo canterano o no para unirlo a Blanco, Berni, Sinanovic y Freeland y tener ya los cinco exigidos en plantilla de 12 jugadores. La Federación Española tendrá que examinar cuándo se dio de alta federativa la ficha de Lima y si ha pasado seis meses en cada uno de esos tres años.
Otro tema polémico y que puso sobre la mesa la propia Asociación de Jugadores. Si un español estudia fuera y vuelve a España con 18. 19 ó 20 años y no ha pasado tres en una cantera, en principio no sería cupo. Es el caso, sin ir más lejos del pequeño de los Gasol, Adrià, que ha estado en Estados Unidos.
Pues bien, se le admitiría como cupo explica Joe Llorente porque se ha creado una comisión de seguimiento de esta marco de contratación firmado para los próximos cuatro años para atender a los casos excepcionales que vayan surgiendo. Evidentemente, sería un poco absurdo poner trabas a estos jugadores españoles que hayan estudiado fuera.
Por último, están los ‘cotonous’. Son los jugadores provenientes de países caribeños y africanos con un convenio especial con la Unión Europea. Hasta ahora no se les admitía, pero ahora la UE dice que no se les puede poner trabas ya que están amparados legalmente por ese convenio. Por tanto, son comunitarios.
Hay algunos jugadores africanos que están siendo ofrecidos y que militan en otros países. En la ACB, el caso más conocido es el de Pape Sow, que ha jugado en Alicante y Vitoria. Lo único que les impediría jugar es que el gobierno español exigiera a estos trabajadores una moratoria o un permiso de trabajo especial.