1-0 para el Real Madrid: la defensa le lleva a un triunfo sufrido (83-75); el Olympiacos ganó al Efes

El Darussafaka hizo 24 puntos en el primer cuarto y 29 en los dos siguientes. En realidad, anotó 24 del minuto 17, cuando tenía 36, al 35, cuando el 74-60 parecía dar un claro triunfo ya al Real Madrid. El sprint final del equipo turco le metió en el partido y los de Laso tuvieron que sudar hasta los segundos finales. Victoria por 83-75 al final y quedaron claras tres cosas: que Llull está en éxtasis, que Wanamaker es muy bueno y que la defensa es lo que va a meter en la Final Four al Madrid.

El 36-37 al descanso era fantástico para el Madrid viendo el 25-36 del minuto 17, con el equipo turco dominando el partido a su antojo. También el rebote, anotando con fluidez, sabiendo sus puntos fuertes, el triple y acciones de uno contra uno de sus polivalentes exteriores.

Wilbekin estaba a cero y sólo tiró una vez en la primera mitad pero Bertans, con 6 puntos, Clyburn, otros 6, y Wanamaker, 10, cumplían. Además, Harangody se iba a los 8. En defensa, jugaron a tapar el perímetro, a atascar la circulación de balón madridista. Siendo tantas veces un equipo que abusa del triple porque muchos pueden meter, los blancos llevaban un 2 de 5 con ese 25-36.

Pero en minuto previo al descanso emergió la figura de Llull para clavar dos de los suyos y coronar la remontada. Metió otro para el 46-41 en el minuto 23 y ahora era el Madrid el que mandaba. Con su defensa y con las ideas más claras en ataque tras el paso por los vestuarios.

Ocho puntos de Ayón recibiendo muy bien debajo del aro rompieron la defensa visitante. Draper, titular en el segundo tiempo, también fue importante con su defensa y ritmo (51-46, min. 27). El Darussafaka no le perdía la cara al encuentro (56-53) aunque Randolplh les castigó con 5 puntos para 8 de renta en los segundos finales del tercer periodo.

Carroll puso una máxima diferencia ya importante con un triple (68-58, min. 33). Subió aún más (74-60) y de repente todo cambió. El choque parecía sentenciado y con algunas buenas defensas, ataques rápidos y algunas decisiones arbitrales raras, un 76-72 restando dos minutos y un 78-75 a falta de uno. Personal sobre Llull, que mete uno sólo pero Rudy reboteó y el propio Llull clavó un tiro de dos desde cuatro metros para un ya definitivo 81-75. No está mal meter 83 puntos con sólo 8 triples anotados, eso sí, en 15 intentos.

 

Por su parte, el Olympiacos se impuso por 87-72 al Efes y también se coloca con 1-0. No tuvo mucha historia el partido pues el equipo griego fue aumentando su ventaja de cuarto en cuarto mostrándose muy superior.