A las 12.40 comienza una final que siempre es apasionante pero que si además enfrenta a los dos grandes colosos, Madrid y Barça, adquiere tintes más épicos por la eterna rivalidad que arrastran. Los blancos pueden parecer ligeros favoritos por tener ellos el factor cancha, pero es indudable que los azulgrana llegan en un buen momento y con Oleson y Mavrokefalidis tapando los enormes huecos que dejaron las bajas de Mickeal y Jawai.
A ello se refiere en las horas previas Navarro, que considera que todo lo vivido durante el curso ya no sirve i tampoco la final que ellos ganaron hace doce meses: «Cada año es unun momento diferente y relacionarlo no tiene sentido porque nada de lo ocurrido el año pasado es comparable. Este es un nuevo momento, muy bonito, que seguro que va a gustar mucho a todos los seguidores del baloncesto. Incluso estos equipos no son iguales respecto a los que iniciaron la temporada por lo que será una nueva vivencia y es difícil hacer un pronóstico en este nuevo escenario».
El escolta no quiere oír nada sobre si un título del Madrid cambiaría un ciclo de dominio blaugrana: «Parece que si un año perdemos, perdemos la hegemonía, llevo escuchando eso en los últimos años, cuando lo normal es que con equipos de tanto nivel las victorias se alternen. Será una gran final que llega en un momento muy interesante para nuestro deporte. Lo más importante será que las audiencias sean altas, que los aficionados se enganchen y disfruten».
Pablo Laso cree que su equipo ha aprendido de la decepción de la final perdida la pasada campaña: «Siempre repito que las derrotas enseñan más que las victorias desgraciadamente, porque son lo más bonito del deporte. Ojalá el equipo haya crecido y aprendido tras esa derrota. Desde entonces han pasado muchas cosas. Nos hemos enfrentado 5 veces y para mí es una situación nueva e intento verla así. Empieza una serie diferente a la del año pasado. Hay diferencias, con jugadores diferentes… y hasta las camisetas han cambiado».
El técnico piensa que el factor cancha puede ser decisivo: «Esta vez tenemos la ventaja de campo que nos ganamos durante todo el año pero habrá que ir partido a partido”, recordó, a la vez que asume la presión existente. “Un equipo como el Real Madrid tiene presión desde el primer día. Hemos estado cerca de todos los títulos pero el equipo ha sido capaz de crecer y trasmitir mucho. Desde hacía muchos años no se repetía final, que para nosotros tiene un poco de todo: de reto, de obligación y de satisfacción. Deseamos que la gente vibre con esta clase de partido», añadió.
Por último, Rudy Fernández elogió al rival, así como al propio proyecto madridista: «El Barça tiene un gran equipo, con mucha experiencia en este tipo de encuentros. Una final es una final, pero este proyecto del Real Madrid es ambicioso y está haciendo las cosas muy bien».
El jugador admite que «es cierto que en estas finales soy un novato, como lo fui en la de Euroliga, pero la afronto con la misma ambición y trabajo que durante la liga regular y con mucha ilusión. En estos dos partidos en casa hay que ver el palacio lleno y somos conscientes de que deberemos dejarlo todo en pista», aseguró.
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